«Hace cinco años, mi marido decidió encargarles el reportaje de nuestra boda a dos chicas que terminaron ese mismo año el módulo de fotografía. Me dijo «démosles una oportunidad, son jóvenes y necesitan el apoyo de la gente». Cuando me lo comentó tuve mis dudas. Pensé… ¿voy a dejar que dos «niñas» atrapen en el tiempo uno de los momentos más importantes de nuestra vida? Pero después de conocerlas entendí por qué Arturo las había elegido.
El día fue genial. Cintia y Maite son majísimas, y tienen una paciencia enorme. Se adaptaron totalmente a todo lo que les propusimos y el reportaje final quedó genial. Tanto es así que hemos vuelto a compartir otros momentos tan maravillosos como el nacimiento de nuestros hijos.
Chicas, enhorabuena por vuestro trabajo. Espero que todo os vaya genial.
Seguro que volvemos a contar con vosotras para compartir algún otro momento.»
Arturo y María